Durabilidad: deben tener un ciclo de vida amplio, en las condiciones ideales y según los términos del fabricante.

Resistencia al agua y a la humedad: un sellador debe ser capaz de soportar la exposición al agua y a la humedad, sin perder adherencia ni flexibilidad. Es especialmente importante si estás tratando filtraciones, goteras o condensación.

Resistencia química y mecánica: Para garantizar su durabilidad y adherencia, los selladores deben ser resistentes a los agentes químicos y a la intemperie, sin deteriorarse o desprenderse. Ten presente que esto es muy importante si lo aplicas con en zonas con mucho tráfico.

Facilidad de aplicación y limpieza: Un sellador y adhesivo debe ser fácil de aplicar y de limpiar. En la mayoría de los casos y, según su presentación, debe ser aplicado con una pistola calafatera profesional.

En el mercado, podrás encontrar una gran variedad de selladores con características que pueden diferir entre sí: algunos son más fuertes que otros o tienen mayor flexibilidad. En el contexto de los sellantes y adhesivos, esta última propiedad es fundamental para prevenir y cuidar tus espacios, y aquí te contamos por qué.

¿Por qué la elasticidad en un sellante importa?

En términos generales, la elasticidad es la propiedad que tiene un material para deformarse bajo tensión y luego volver a su forma original una vez se elimina esta tensión. En el contexto de los sellantes, esta propiedad es particularmente importante, porque:

• Los edificios y estructuras están en constante movimiento, por las fluctuaciones de temperatura, cambios en su carga o vibraciones. En este caso, los sellantes pueden acoplarse a estos movimientos, sin romperse o agrietarse y, de este modo, evitar fugas de agua o filtraciones.
• La elasticidad es sinónimo de durabilidad en el mundo de la construcción. Aquellos materiales que puedan adaptarse a los cambios en la estructura sin perder su adhesión garantizan la protección del espacio y evitan reparaciones frecuentes.
• Prevención de fugas: en algunas aplicaciones, como puertas o sistemas de revestimiento, la elasticidad de los sellantes es crucial para evitar fugas. En términos energéticos, esto contribuye a un ambiente interior más eficiente y cómodo.

Soluciones a tu alcance…

En Metic encuentras nuestra Industry 600, un sellante de alta calidad, basado en tecnología hibridad (es decir, la capacidad de curar con la humedad ambiente y la formación de goma elástica), una característica te ofrece una serie de ventajas, como curación eficaz, adaptabilidad, larga duración, entre otras.  Está particularmente diseñado para formar un sello con alta duración gracias a su capacidad de adherencia, elongación y resistencia a los rayos UV. Al ser completamente impermeable impide el crecimiento de hongos, además de resistir a la intemperie y altas temperaturas.

Para aplicarlo correctamente, te recomendamos seguir estas breves recomendaciones:

• Preparar la superficie antes de aplicar el producto, limpiándola de polvo, grasa o restos de pintura. La superficie debe estar seca, lisa y sana. Retire recubrimientos o materiales anteriores que no permitan su adherencia.
• Si el interior de la junta se encuentra con excesos de material de obra, debe liberarse completamente para ser sellada.
• Aplícalo con pistola profesional de calafateo de forma homogénea y busca que el sellador se adhiera en toda la superficie de la junta.
• Antes de que la Industry 600 comience a formar película, ejerza una leve presión sobre el sellador con espátula o cuchara de plástico para acomodar la junta.

Y recuerda, elije el producto adecuado según las características del material, la superficie y la función que se desea realizar, así como seguir las recomendaciones generales sobre su aplicación y limpieza. De esta forma, se podrá obtener un resultado óptimo y duradero.

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